jueves, 27 de agosto de 2009

Tres semanas!!!










He notado que he crecido...igual si sigo así podré ser tan grande como el chucho y luego le meteré yo miedo a él jijiji

Estos días además de jugar siempre que estaba despierta he aprendido varias cosas que no le gustan a Mónica. Como que la persiga al baño, y quiera subir a su regazo y menos si ya se une a la fiesta el chucho, ahí ya se pone más gritona.

A lo largo del día escucho a voces mi nombre cada poco, no puedo arañar el sofá, no puedo jugar con sus playeros, no puedo jugar con los cables, no puedo meter el morro en la sartén, no puedo molestar a Tristán mientras come, bueno, ahí el que me vocea es él. Tampoco le hace gracia a la humana que mientras ve la televisión yo le cambie de canal,a veces me aburre lo que ve, yo también quiero el mando!!!






También he descubierto cosas que me gusta hacer, como tumbarme en una silla de la terraza y estar al sol.El chucho lo ha aprendido de mi, ahora tb se sienta en la silla, pero claro, él no se puede tumbar, y está un poco ridiculo.También me gusta esconderme detrás de las puertas, me gusta meter sustos a este par de dos bobos.Cuando Mónica duerme en el sofá me gusta acurrucarme en a su lado, poner mi cabeza sobre su brazo y a dormir, ronroneo de felicidad y le doy lametazos porque me gusta, aunque a ella no mucho porque esconde siempre la cara.Y sí, también me gusta dormir con Tristán.



Me sigue pareciendo un poco tonto con en esas posturas ridiculas para dormir.Pero a veces aprovecho y juego con sus patas...




En fin, que ya he hecho esta casa como mía, y estoy muy tranquila. Mi "hermano" ya no me asusta como lo hacía los primeros días y ya incluso podemos dormir, comer, beber y jugar juntos, aunque eso último más bien juego yo con él. Y él mete sus juguetes en mi arena y yo se los meo y demás jijiji.Muy listo no es, mira que utilizar mi arena como escóndite.




Y eso es todo amigos.

Miau-miau.

martes, 18 de agosto de 2009

Dos semanas!!!




Mierda de chucho.

Que ahora le da por ladrarme, será posible!

Estaba comiendo él el otro día y me acerqué a olisquear un poco, no tenía intención de quitarle su comida, y menudo ladrido que soltó.


Ahora tampoco le gusta que juegue con su cola, que aburridooo.

Me da igual, tengo más juguetes que él, toda la casa es mia!!!

Cuando estoy cansada de jugar me gusta tumbarme sobre la humana y ver la tele
con ella, hay cosas curiosas en esa caja.Y sonidos!

Con sus bolsos ya no puedo jugar, me los tiene escondidos, creo que no le hizo gracia
que el otro día mientras jugaba con uno se le cayera en la cabeza al chucho, y eso que él me volvió a ladrar, que cansino.

Estos días hemos estado el chucho y yo bastante tiempo solos, no sé por donde andaba Mónica, pero la he echado un poco de menos, luego cada vez que la veía iba detrás de ella llamándola, no me gusta que me ignoren, quiero mi ración diaria de mimos.Cuando está tumbada en el sofá aprovecho a acurrucarme junto a ella, pero a veces no le debe de gustar porque me echa para el otro sofá, sé que hace calor, pero quiero mis mimos!!! Lo mismo cuando se sienta delante del ordenador, me cansó a maullar y ni caso, bueno cuando intento subir por su pierna me coje...pero pronto se cansa...que borde! Pero tengo otra vía para llegar a ella. Subo por detrás de donde está el teclado y sorpresa!!! aparezco delante suya, pero no, no le gusta que me ponga sobre el teclado tampoco.

He comprobado también que no le gusta que le dé lametazos con mi super lengua, y menos en el sobaco, pero es que no sé que se ha hechado que olía rico...

La humana sigue intentando que haya un acercamiento entre el chucho y yo, ya nos hemos olido bastante....



Pero sigue sin gustarme. Y yo creo que tampoco le gusto a él, por las caras que me pone...




Sé que piensa que sólo soy una bola peluda. Pero él no tiene mi elegancia natural, además es que pone unas posturas para dormir...que en fin, sin comentarios. Mejor verlo vosotros mismos.





Otra cosa que he aprendido esta semana, es que no debo de meter el morro en el plato de comida de la humana, primero porque me riñé y segundo porque a saber que me encuentro, que ayer lamí un trozo de guindilla...y no me gustó nada!!!! que picores!!!

Y eso es todo.

Miau-miau

lunes, 10 de agosto de 2009

Una semana!!!


Ya llevo 7 días en este piso. La verdad es que cuando llegué me pareció muy grande, pero ahora ya no tanto, lo tengo controlado, y la terraza me gusta más, ya voy sola hasta la caja cuando me apetece y no tengo que comunicárselo a la humana por maullidos, que aunque me entiende bastante creo que en ocasiones me ignora a propósito. Como antes, que estaba en la cocina haciéndose la cena y yo le pedía comer, creo que fuí bastante clara pero pasó de mi hasta que acabó ella, será posible! je, pero para que vea que tengo caracter despues de cenar yo he atacado a su bolso, además que encontré una cosa para jugar, hacen ruido cuando les doy con la pata, creo que son para abrir la puerta de casa.


Ayer descubrí en la salita otra cosa para entretenerme, es un coso de plástico que curiosamente tiene tierra y lo que en su momento debió de ser un planta, es divertido sacar la tierra de dentro, pero creo que a Mónica no le hace tanta gracia como a mi, cada vez que me ve haciéndolo grita:Momo, eso no!!! y me persigue pero yo sé esquivarla.

Una noche vinieron otros humanos, me gusta la gente, todos me ven y me acarician y me dicen cosas bonitas, pero eso sí, como aún tengo la barriguita un poco mal suelto unos gases que no les gustan nada, cuando eso me alejan de ellos y se ponen locos. Que cosas!si no huele tan mal!

Ahora duermo en el sofá feo, huele a perro, pero ya estoy acostumbrada, me gustó más la primera noche que mi padrino me dejó dormir en la cama cómoda y además me daba mimos. Por donde andará??? él si que me entendía. Ahora si que me da por jugar con los regalines que me hizo, al principio el ratón me daba miedo, es que parecía uno de verdad y yo aún no estoy acostumbrada a cazarles, pero ya he comprobado que no, por algo llevaba un cascabel en la cola. Hay un juguete que ya no lo quiero, alguién se lo dió al perro y me lo babó todo, que asco, ese lo he metido debajo del sofá, ahí está bien.

Me gusta dormirme sobre Mónica, estoy cómoda y me da calor, además me gusta el ritmo de su respiración. Ronroneo de gusto para que me acaricie más, pero ya he comprobado que cuando tiene la cosa negra rectacgular que emite sonidos mejor no intentar acercarme a su cara, me aparta y no hay manera. Mira que intento mirar por debajo del chisme ese para que vea que estoy ahí, pero lo baja, y le doy con la pata a ver si puedo quitar los dedos de esa cosa pero la tiene bien agarrada. Y maullo, pero no me debe de entender, porque si lo hago me deja en el otro sofá, que tonta, si no es eso lo que quiero.

Y el perro, bueno, se empieza a tomar alguna libertad que otra conmigo, antes estaba en mi arena tranquilamente y tuvo que venir a olfatear que estaba haciendo, que cochino! pero con mi superbufido lo asusté. Aunque creo que no es una amenaza, anoche mientras dormía en el sofá me acerqué sigilosamente a él a ver como olía, no parece un mal tipo, un perro, sí, pero no es de los malos. De hecho, he vuelto a jugar con su cola y no parece molestarle, creo que hasta le divierte, poco.

En fin. No ha estado mal la primera semana.

Miau-miau...

sábado, 8 de agosto de 2009

Hola, me llamo Momo



Tengo alrededor de un mes y medio, o eso me han dicho, y me han elegido este nombre en honor a un personaje de un librito de un escritor llamado Michael Ende, por lo visto es una niña que ayuda a todo el mundo, yo no creo que sea tan buena, soy algo traviesilla, será la edad...

Para quien no conozca este libro, aquí hay info de él: http://es.wikipedia.org/wiki/Momo_(novela)


Tengo 5 hermanos de camada a los que les he perdido la pista, y ahora me ha salido un hermano nuevo, sólo que es un perro, y encima de los grandes, se llama Tristán. No me molesta mucho, lo mantengo a raya con mis super bufidos, es más asustadizo....No me importa compartir sofá con él, pero eso sí, cada uno en su lado.


Quién me ha adoptado y me ha llevado a su casa, se llama Mónica, no la conozco mucho pero me gusta que me acaricie además ya va entendiendo mejor mis maullidos y me ha echado una cosa que me ha quitado los bichos que tanto me molestaban y también los de la barriguita, estoy más tranquila y contenta...Además que me da una comida muy rica, aunque a veces por fastidiar se la robo al perro, no me gusta mucho, pero bueno...De todas formas voy a dejar de comerla porque parece que a él le da lo mismo, eso sí, la mía sí que se la come, tengo que comérmelo todo para que no me robe nada a mi.


Ya es tarde, y me entra el sueño, voy a dormir sobre ese sofá tan cómodo, me encanta estirarme...